¿Qué es el autismo?

El psicólogo y científico cognitivo, Angel Rivière, pionero en el abordaje del autismo, entendía el Trastorno del Espectro Autista (TEA) como condición neurobiológica que se manifiesta en la infancia y que persiste a lo largo de la vida. Según Riviere, este trastorno se caracteriza por algunas dificultades en la comunicación social, así como en el comportamiento estereotipado y los intereses restringidos. Estas características se pueden mostrar de forma diferente en cada persona, haciendo que el autismo sea un espectro que recoge un gran abanico de manifestaciones en lo que se refiere a las dificultades, necesidades y capacidades. Por este motivo, el autismo en la edad adulta no es un camino único, ya que existen tantos caminos como personas autistas. Esta diversidad, lejos de ser una limitación, enriquece la comprensión de la condición autista, resaltando la importancia de reconocer las necesidades individuales y promover la inclusión y aceptación dentro de la comunidad.

Síntomas de autismo en la edad adulta:

Las personas autistas presentan dificultades en las siguientes áreas:

• Comunicación e interacción social:

Las personas autistas pueden tener dificultades en la comunicación verbal (en la comprensión literal o respuestas adecuadas al contexto en el que se encuentran, por ejemplo) y en la comunicación no verbal (como la falta de contacto ocular o la comprensión de gestos).

• Comportamiento estereotipado e intereses restringidos:

La necesidad de rutinas estrictas, la existencia de intereses restringidos (gran interés por temas muy concretos) y la rigidez frente a los cambios son algunas de las afectaciones de las personas autistas. También pueden serlo el balanceo, los movimientos repetitivos y las hiper o hiposensibilidades (a la temperatura, a la luz o al dolor, por ejemplo).

Las personas autistas presentan dificultades en las siguientes áreas:

• Comunicación e interacción social:

Las personas autistas pueden tener dificultades en la comunicación verbal, como la comprensión literal o las respuestas adecuadas al contexto en el que se encuentran. Además, la comunicación no verbal también puede estar afectada, como la carencia de contacto ocular o la comprensión de gestos sutiles. Esto puede hacer que establecer y mantener relaciones sociales sea un reto constante.

• Comportamiento estereotipado e intereses restringidos:

La necesidad de rutinas estrictas es una característica común en las personas autistas, puesto que les proporciona un sentido de orden y previsibilidad en un mundo que puede parecer caótico. Además, a menudo muestran gran interés por temas muy concretos, pudiendo dedicar una gran cantidad de tiempo y energía a estos intereses. La rigidez frente a los cambios puede ser extrema, provocando ansiedad o malestar en situaciones nuevas o imprevistas. Además, los comportamientos repetitivos, como el balanceo u otros movimientos, son también comunes, junto con las hiper o hiposensibilidades a factores ambientales como la temperatura, la luz o el dolor. Esta sensibilidad extrema puede afectar significativamente a su calidad de vida e interacciones diarias.

Como hemos mencionado, cada persona autista es única, y las características pueden manifestarse de forma distinta en cada caso. Por este motivo, algunas personas pueden presentar grandes dificultades en diversas áreas y otras menos afectación en su vida diaria.

Además, muchas características no son visibles en los ojos de los demás. Ante esta diversidad, también encontramos fortalezas que rompen barreras y pueden desafiar nuestras expectativas (Templo Grandin). Así, las personas diagnosticadas de Trastorno del Espectro Autista pueden tener un gran abanico de capacidades:

• Gran conocimiento sobre temas muy concretos relacionados con sus intereses.
• Mucha atención a los detalles.
• Mucha memoria para fechas, eventos o datos que forman parte de sus temas de interés.
• Sinceridad.
• Responsabilidad con los derechos y las normas.
• Gran perseverancia con lo que forma parte de su campo de interés.
• Razonamiento lógico – pragmático.
• Mayor competencia visual y reconocimiento de patrones.

Diagnóstico de Trastorno del Espectro Autista:

En el Institut Gestalt te ofrecemos un nuevo servicio de psicología que te permitirá obtener una posible orientación diagnóstica de TEA. Esta valoración constará de varias sesiones diagnósticas, donde se realizan diversas pruebas y test psicológicos estandarizados, así como una visita devolutiva con los resultados y la entrega de un informe final detallado

Acompañamiento al autismo:

Como expone Elaine Hall, coach y madre de una persona autista, el autismo no se trata de una enfermedad, por lo que no necesita ser curado, sino que necesita ser  entendido.

Por este motivo, desde el Institut Gestalt, ofrecemos un acompañamiento postdiagnóstico. El equipo está formado por psicólogos especialistas que trabajan por abordar el autismo en la edad adulta desde una mirada integradora, para poder entender la forma de percibir y ver el mundo desde el autismo. Las sesiones se realizarán con un seguimiento regular y se centrarán en trabajar objetivos como la aceptación del diagnóstico, entender cómo el autismo está presente en la vida diaria, la resolución de conflictos y la toma de decisiones, la regulación emocional, etc.

Equipo Diagnóstico del Institut Gestalt

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